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El sector hotelero global experimenta una expansión robusta y sostenida, a excepción de Medio Oriente y África. Un informe de Lodging Econometrics (LE) del segundo trimestre de 2025 revela una aceleración en la construcción y planeación de nuevos hoteles, confirmando la recuperación post-pandemia con casi 15.000 proyectos y más de 2,3 millones de habitaciones en desarrollo. El turismo, los viajes corporativos y la inversión inmobiliaria impulsan esta tendencia, aunque con contrastes regionales.
América y Asia muestran un fuerte impulso. Asia Pacífico lidera con 7.149 proyectos y 1.279.851 habitaciones, con China concentrando más del 55% de la actividad asiática. América, especialmente Estados Unidos, es líder en el hemisferio occidental con 5.704 proyectos y 649.919 habitaciones, impulsada por el turismo interno, el nearshoring y eventos. América Latina también se recupera, con México, Colombia, Brasil y República Dominicana destacando por inversiones en turismo de sol y playa, lujo y wellness.
Europa tiene un crecimiento moderado, con 2.191 proyectos y 317.075 habitaciones, liderado por Alemania y Reino Unido, aunque factores como el Brexit y la inflación han moderado la inversión.
El dato más notable es el estancamiento o disminución de proyectos en Medio Oriente y África. Regiones que antes lideraron megaproyectos enfrentan ahora desafíos geopolíticos, incertidumbre económica y sobredemanda. En África, los avances son puntuales en zonas turísticas como Marruecos, Sudáfrica y las islas del Índico, pero el rezago estructural y la falta de financiamiento persisten.
La expansión hotelera global no es solo un rebote, sino una reconfiguración del sector, con mayor énfasis en sostenibilidad, tecnología, experiencia personalizada y diversificación geográfica. Las grandes cadenas construyen de manera diferente, con modelos híbridos, espacios de coworking y conceptos boutique.
Para 2026, con eventos como el Mundial de Fútbol, el crecimiento en América parece asegurado. Sin embargo, la industria enfrenta retos como la escasez de mano de obra calificada, el aumento de costos de construcción y las altas expectativas de los consumidores post-COVID.
En resumen, el sector hotelero se expande de forma desigual. América y Asia consolidan su liderazgo, Europa se adapta con prudencia, y Medio Oriente y África marcan una pausa. La innovación, la sostenibilidad y la comprensión del nuevo viajero serán cruciales.